Final



Son las 20:30 del 31 de diciembre. Acaba de cerrar la carnicería y verdulería, el esqueleto de caño donde van los cajones está vacío. 
La encargada -digamos que se llama Claudia- con los chicos que atienden -digamos Román y Sergio- y el señor mayor de la caja registradora en la vereda -sería don Miguel- están a punto de irse.
Don Miguel es el único sentado. Para brindar antes de irse a las casas Claudia sirve sidra en vasos de plástico sobre un banquito.





Así finaliza este capítulo de Ciudad del Buque. Hasta el año próximo.


#loCheto 3 Relato ganador

TE CUENTO MI EXPERIENCIA

Mistela D.


Si me preguntás, somos felices. No necesitamos más que unas cuantas cosas. Siempre un buen helado, eso sí. Una pizza ok. Un buen club de tenis (squash es lo mejor), natación, caballos. La chicas necesitan seguridad, un comisario amigo debes tener por ahí, para que mande un can que las siga, a media distancia, en las compras, siempre bien vestido aunque discreto. En términos de estudios, nada, arreglás con el decano, podés equivocarte en alguna cosita, eso es normal, pero nada del otro mundo. Desaprobar no es bueno, aunque viene bien desaprobar de vez en cuanDo para rebelarte y demostrar que no estás dispuesto a encajar en el sistema, que no sos oveja. Si aprobás todo sos un tragalibros y no está bueno. Enamorás a unas negras pero al final abortás y te juntas (casarse ya fué) con alguien de tu cepa. Ella no va a trabajar nunca y vos sí, aunque lo menos posible, vivir de propiedades es lo mejor, gerencias no (eso es para los pobres arribistas) es preferible asesor de algo. Toyota es un horror, lo menos de lo menos, mínimo un full clásico de Ford, Renó, Peugeot, Chevrolet ajá, da, Fiat mmmm. 4 x 4 forget, los noventas fueron. En tema de look con Wanama, Kevingston, Volcom, Prototype hasta ahora bien, Vuitton se cagó, no va más, Hilfiger es de fierro, Legacy hace rato que no porque vende mucho hasta en las provincias dark del Norte del país. Bolivia todavía garpa para hacer una experiencia que te abra la mente, pero no sé hasta cuándo. Brasil fue, Europa fue. Oceanía trendy a full. Igual no hay que quedar en los laureles sino chequear siempre porque una de las lacras del capitalismo es que todo tiende a bajar de nivel.


#loCheto 2

LO MÁS


Mis amigas copadas son lo más, saben que hay que seguir al corazón y hacerlo cuando el momento manda. Ejercitan el derecho de gozar fuera de cualquier vínculo de dominación esclavista. Saben que un alegrón no se le niega a un amigo buena onda, que no joda con celos, esa bobada de la propiedad burguesa en la pareja. Van por el aborto no punible. La mega camioneta de papá está para usarla. Los peluches ya fueron, ahora manda Lady Gaga "que es una artista de izquierda aunque sea yanqui, Tomás". Todas fuman cuando tienen ganas, lo justo, ni menos ni más. Estuvimos juntos en una acampada para legalizar, pero si no legalizan, bueno, igual no va a faltar. Del alcohol conviene no abusar, vamos por lo natural. Hacemos lo que queremos porque podemos y chau. Son el paraíso terrenal. Yo, hijo de peronistas, me siento de maravilla con esta gente que está por la apertura de mentes y tiene la plata para hacerla. Lo que tienen lo convidan sin mezquinar, como a la Marta, la cocinera, a la que le invitan unas pitadas a la siesta cualquier sábado y ponen cumbia para bailar todas juntas sin diferencias. Ellas se copan con Manu Chao y a mí me gusta también, pero en el celular tengo temas de Abel Pintos, que para ellas es grasa, y clásicos de la guaracha que sí está re-bien y la ponemos bien fuerte por bluetooth en el equipo para escuchar desde la pileta. Así que estoy de diez, no creo que me pueda casar así nomás, ya vamos a ver, porque yo vengo de donde las cosas son o no son, lo que es es o no es, nada de más o menos o de qué se yo, no, en casa nos enseñaron que hay que concretar: trabajo, mujer, un hijo, una casa y no andar dando vueltas. Pero vamos bien porque conseguí laburo por Maia que me hizo entrar en la oficina de la empresita constructora de su hermano. Gano digamos que bien y visto bien, qué risa que al lado de ellas, a veces tan desaliñadas, parezco yo el chico de plata. No tengo una fija, ni siquiera Maia que pareció amarme alguna vez, o Antonia, o Renata que me llama todo el tiempo por cualquier boludez, por un "cargame saldo" ponele, qué hija de mil. Ya sé que ninguna se va a dejar embarazar así nomás, igual mamá me dice que con las "veletas" no me enganche, que me busque alguien más normal, Fátima puede ser, ella no se enfiesta, pero por ahora no sé. La felicidad es así, nadie sabe por dónde saldrá al final, cómo se terminará de abrochar. Mi viejo está conforme, estamos haciendo las cosas bien, como decía mi abuelo: "Tomás, nosotros vamos siempre para arriba."




#loCheto 1

ENFERMERÍA DE GUARDIA EN NAVIDAD


Esto es de una charla de lo que me contó mi amiga enfermera.
La cheta llegó con una cortada en el hombro, fiera, la tenía que coser.
Era la madrugada del 25 del 2003. La amiga, otra cheta igual que ella pero gorda, la acompañaba, me decía que solo ella estaba sobria como para manejarle el auto y traela para acá.
Eran una banda de amigas en una fiesta de esas de las fincas. La minita estaba pasada de alcohol y me la juego que se había metido pastillas, por la mirada te das cuenta.
El novio la había metido un puntazo con un pedazo de esa botellita de champagne chiquita.
En su media lengua me decía que había sido una boluda porque se puso a bailar con el ex que andaba ahí también, y después que bailó refregándose con otras dos minas más al son del tema ese de Moulin Rouge.
La gorda completaba datos: que Lautaro se puso como loco del todo cuando la vio hacer de prosti lésbica.
Lautaro, el novio, tiró la botellita contra una columna, la guardia no hizo nada, su papá es gerente de la empresa de seguridad. Agarró un pedazo y la encaró a la flaca, María Luisa.
La gorda siguió: Vos no te diste cuenta que venía, primero te zamarreó y lo miraste pero no te diste cuenta qu era él ¿o sí? y te le cagaste de risa en la cara. Cuando lo empujaste él te metió el puntazo y te hizo mierda el hombro.
Cuando brotó la sangre ella muy divertida agarró y marcó las manos en un sofá blanco. La gorda la subió al auto (el Audi de la flaca) y la trajo.
¿Te dije que tenía que coserla? Bueno le metí antestésico local y comencé. Le sonó el celular, era Lautaro. Pelearon, quisiste matarme etcétera, luego parece que él le dijo que la amaba y ella le contestó que también. Cuando cortó revoleó el teléfono y se largó a llorar, en un espasmo le tiré del hilo y me miró con furia.
¡Eh negra de mierda aprendé a coser! me dijo.
Disculpe señora le dije, porque como una pelotuda me salió en automático la manera de responder que tenía de cuando trabajaba de empleada doméstica en la casa de una señora. Disculpe señora, disculpe señora, disculpe señora, siempre así aunque la culpa hubiera sido de cualquiera de sus hijos de puta pelotudos grandes que todavía vivían con ella.
Terminé mi trabajo, pagaron y me dieron una propina de 20 pesos. Pero mi odio crecía por segundos, estaba hirviendo, roja de ardor, se me quemaban la cara, las tripas. Tanto que me pelé el orto para salir de sirvienta para que esta remil puta cheta chupaculo de mierda me venga a tratar así, si le hubiera metido un aguja con sida.


#LoCheto CONCURSO DE RELATOS 48 HS (finalizado)




#loCheto CONCURSO DE RELATOS EN 48 HS (en votación ahora en la página de face: Ciudad del Buque / finalizado)

* tema: lo cheto.

* extensión: lo que dure leer un post de facebook sin cansar o aburrir.

* participación: abierta, mandar el relato hasta las 23:59 hs. de este LUNES 23 de diciembre como Mensaje Privado a la página de Ciudad del Buque.

* definición: luego de la hora de cierre todos los relatos recibidos se publicarán (sin firma de autor) en la página de Ciudad del Buque y ganará el que acumule más "me gusta" hasta las 23:59 hs del MIERCOLES 25 y se anunciará el relato ganador. En caso de empate lo define el organizador.

* premio al más gustado: una tarjeta de recarga de 50 (excepcional por fiestas) de movistar, personal o claro.



Resultado concurso #loRosa

Relato ganador del concurso #lorosa, de Alfredo Caminos #LoRosa, empatado en 3 con el relato 1, se desempata por cantidad de lecturas a la hora del cierre: 57 a 52.

#loRosa relato 7


La Rosa tenia las rosas rosas mas hermosas de todita Ciudad DEL BUQUE...era la envidia de la Jazmin, de la Aleli, de la Hortencia y de la Margarita que a escondidas cuchicheaban sobre "vaya una a saber que gualichos le pone a la tierra para que le crezcan asi..."
En cambio, la dulce Rosa con su inseparable y misteriosa amiga la Pasionaria, sonreian divertidas por las ocurrencias de sus vecinas...
Esa primavera fue la mas colorida y perfumada del lugar...



#loRosa relato 6


Seducido por la Sirena

Aún cuando Octavio fingió no haber escuchado el canto desaforado de la mujer, que incluía aleteo de manos y gestos gelatinosos en cámara lenta. Lucía insistió, fue por más: primero un zamarreo, luego un estruendoso cachetazo y finalmente una patada en el trasero. Nada seductor para una dama.

-¡Qué patético que sigas aquí desgraciado infeliz!-, era el estribillo de Lucía.

A Octavio nada de esto le aterraba, es más lo seducía convivir con ese canto del que se había enamorado hace veinticinco años atrás.


#loRosa relato 5


#lorosa



Alfredo Caminos


Odiaba la flores blancas. Y quiso el destino que el rosal del jardín mostrara su primera flor... y blanca. Por eso contrató un jardinero, de esos que vienen con una tijera de podar muy grande, que al llegar parecen asesinos de plantas antes que embellecedores del lugar. Le ordenó podar el rosal y, sobre todo, la única rosa blanca que se erguía en el centro. La cortó de un solo golpe, y en el acto salieron dos rosas blancas. Las cortó y salieron cuatro, las cortó y perdió la cuenta de cuantas veces cortaba y volvían a salir. Entonces, se prendió con sus manos en el tallo para aprisionar el rosal como un verdadero asesino y las espinas lo hicieron sangrar. En ese momento, las flores, alimentadas de sangre, cambiaron de color, algunas rojas, otras rosadas, pero nunca blancas.



#loRosa relato 4


Ils ém

Sus casas vecinas se volvían una gracias a un agujero en la pared del fondo. Los padres de él (más que los de ella) consintieron sus primeros acercamientos, les causaba gracia verlos jugar a la mamá y al papá dividiendo sus tareas en torno a los hijos de plástico que con decoro alimentaban.
Asistieron juntos a la escuela y allí confirmaron su amor frente a todos. Antes de graduarse los hijos ficticios se volvieron realidad y de ahí en adelante sus vidas se unieron como los patios de su infancia.
Ella amaba como gata y él como perro. No hallarse sexualmente les jugó en contra. Ambos sentían la incomodidad del desencuentro mecánico entre sus cuerpos. Intentaron de varias maneras, pero aún con la luz prendida seguían a oscuras. A pesar de ello fueron fieles, siempre bajando la cabeza cuando alguna mirada extraña los conectaba por instantes.
Pasaron años contemplando las fotos de su noviazgo en vez de seguir aventurándose como solían hacerlo. Él se divertía al recordar lo vivido en cada página y ella simulaba sonrisas para no lastimarlo. Cuando le quitaba la vista, se dejaba vencer por el aburrimiento que le abría un vacío en el pecho.
Lunes, trabajo, martes, trabajo, miércoles, también y así hasta el sábado. Lo único que deseaban llegado el domingo era estar separados. Poco a poco la actitud dominical fue contagiándose al resto de los días así como la sarna gana terreno en el lomo del burro enfermo: irremediablemente. Tanta repetición y tan poca innovación los cansó por igual.
Un día de lluvia, de esas intensas que impiden cumplir con lo previsto, los enfrentó merienda de por medio. Allí se sinceraron, argumentando cada uno a su vez las numerosas razones que encontraban para separarse. Concluyeron que aún se amaban pues seguían desnudándose el alma aún con los deseos en entredicho.


#loRosa relato 3


EL CAMINO DE LA MADRUGADA


Nadie podría precisar cuantas cuadras camine, tampoco se enterarían de esos laberintos que cruce, sospecho que ese ejercicio de caminar la madrugada me hacía más corajudo, conjeturo también que esa circunstancia de transitar todas las amanecidas no era una vida color de rosa, sino un castigo. Alguien me podría robar, matar o perderme para siempre en esa maraña de la madrugada y nadie se daría cuenta. No existe la vida en rosa- me decía- mientras zigzagueaba baldosas; existe eso sí, la pulsión de Eros y de Tanatos-solo en eso creo-. Ya estaba cerca de su casa, solo había que entrar. Contemple de pie que ella dormía desnuda, revelé la rosa que traía para ella, y el puñal que como un imán apuntaba a su cuerpo.



#loRosa relato 2


LO ROSA

Navidad aburriría si no fuera por lo rosa de las bombachitas envueltas en papel brillante debajo del arbolito. Me excita imaginar las formas: culotes, tangas, vedetinas, colaless todo fermentado en rosa infanticidio. Vos me conoces y no dudas en probártelas todas. Me invitas a que te depile pero me gustas peludo, gordo y con aire de seudointelectual, sentado junto al arbolito parpadeante, cruzado de piernas y fumando una pipa. Vos con tanga rosa, yo con zunga atigrada, celebramos navidades atípicas, tomando sidra en el jarrito que uso para hacer hervir los huevos y tirándonos de progres. O vos te la tiras de progre. Yo sólo disfruto de la fiesta en donde lo rosa me deja efervescente y con ganas de salir en busca de más intelectualoides sumisos que se dejen vestir, desvestir y convertir en carne adobada al día siguiente.


#loRosa relato 1


LEY FEDERAL DE EDUCACIÓN

"Si (como afirma el griego en el Cratilo)
el nombre es arquetipo de la cosa
en las letras de 'rosa' está la rosa
y todo el Nilo en la palabra 'Nilo."

- ¡Muy bien, Leguizamón! Nunca escuché algo así en mis clases.
- Gracias, profesora.
- Tome asiento. Tiene un diez.


#loRosa concurso de relatos en 48 hs.

#loRosa concurso de relatos en 48 hs.

* tema: lo rosa.

* extensión: lo que dure leer un post de facebook sin cansar o aburrir.

* participación: abierta, mandar el relato hasta las 12 hs. de este SÁBADO 14 de diciembre como Mensaje Privado a la página de Ciudad del Buque.

* definición: luego de la hora de cierre todos los relatos recibidos se publicarán (sin firma de autor) en la página de Ciudad del Buque y ganará el que acumule más "me gusta" hasta las 23:59 hs de ESE MISMO SÁBADO 14 y se anunciará el relato ganador. En caso de empate lo define el organizador.

* premio al más gustado: una tarjeta de recarga de 30 de movistar, personal o claro.

Resultado concurso #lomojado

Concurso #lomojado gana el relato de Pilar Carranza: COSAS QUE MOJAN.

Relato n° 6 concurso #lomojado


Palabras brillan en la noche

Y así, en la oscuridad de aquella noche, el teléfono brilló con su pantalla y en esas letras frías, urgidas, casi necesarias: “que duermas bien, mi amor”.
Desde la cocina regresaba él con una botella de agua fría, como esas palabras brillosas que ahora despertaban a un amante lejano, se acercó a su mujer y le ofreció un trago. “No, gracias” dijo ella, y dejó el celular bajo la cama, dio media vuelta y hundió su cabeza en la almohada. Él se quedó mirando su espalda desnuda un largo rato y sintió que la amaba con todo lo que tenía a su alcance. Con la botella fría transpirando en su mano, era todo lo que podía hacer.


Relato n° 5 concurso #lomojado


EL COSITO

-Alcanzame el cosito, el chirimbolo ese- Dice la Marlene, tratando de parar el arbolito de navidad, el tronco, sobre la base de trípode. Juan está con el mate en la mano y mira como si la escena no existiera, a su mujer y sus dos niñas, afanadas con Jesús, la virgen y los Reyes de plástico. Suelta el porongo y busca en la cajita de zapatos las guirnaldas plateadas que han sobrado del año anterior. Afuera el calor, las gallinas revoloteando alrededor del maíz que tiro cinco minutos antes. Por la radio anuncian lluvias. El calor se hace insoportable. Inmenso, tirano. No hay modo de sustraerse. Sabe que falta poco. El camión va a llegar en cualquier momento. Tiene todo preparado. Ellas siguen, dale que dale. Manzanitas coloradas, cositos, y más cositos. Finalmente el camión llega. Levanta el bolso. Las niñas con Jesús en la boca se levantan y corren a abrazarlo. Marlene, no. Sigue ahí arrodillada, retocando y armando con sus manos duras. Hace fuerza para no llorar. La desflorada le quita su hombre, que esta navidad la va a pasar lejos. Juan sube al camión, saluda a los changos, extiende sus brazos en alto. El camión se va. La Marlene, la cabeza gacha, la cara mojada por la transpiración y tal vez alguna lágrima.


Relato n° 4 concurso #lomojado


Dina se había desarrollado prematuramente. Entre las jovencitas de su edad llamaba la atención por la evidencia de su femineidad.
Su padre, un criado de la familia Wellington, la vio como una oportunidad de ascenso social. En cuanto notó que su niña dejaba de serlo, tomó naipes en el asunto. Se escabullía por la noche hasta la biblioteca y tomaba libros que consideraba buenos de acuerdo al ancho del lomo, el color y el dibujo que configuraban las letras que él no podía entender. Esa seguridad de que se estaba perdiendo algo le dolía en el pecho, porque le hacía recordar que él era quien él creía ser: un esclavo afortunado.
Su padre le había ordenado mantenerse en silencio cuando ojos diferentes a los suyos la estuvieran enfocando. Una vez casada podría al fin abrir la boca.
Patrick, el único hijo de la familia Wellington, no podía disimular la vulgaridad de los pensamientos que se le dibujaban en la cara cuando se encontraba con Dina. Ella lo notaba y no sólo en él, también en el resto de los hombres. Había pasado tantas veces por la situación que no le incomodaba, más bien que se divertía humedeciendo pantalones ajenos.
Se dejó seducir por Patrick, dejándolo acercar su aliento hasta el suyo, pero nunca los labios. Hasta que un día se le escapó la palabra ‘matrimonio’ y allí las respiraciones cercanas le dieron su lugar a las lenguas que poco a poco fueron perdiendo la timidez, abrazándose cada vez más entusiastas.
Seis meses después del primer beso, la desposó. Durante los primeros años de matrimonio se enamoraron perdidamente. Él seguía apasionado por el cuerpo de Dina, y ella había caído rendida tras verle la cara que ponía cuando la escuchaba hablar sobre filosofía, pensando que esos comentarios eran ocurrencias suyas.


Relato n° 3 concurso #lomojado

COSAS QUE MOJAN

María Pilar Carranza


Todavía me acuerdo. Era día del niño y domingo.
Volvíamos de misa con vos y los viejos (todos juntos, sí).
La jaula estaba vacía y la ventana abierta. Me olvidé de cerrarla, te juro que me olvidé. <<No sabe volar, le cortamos las alas>>, decías llorando.
Me olvidé de cerrarla, te juro. Bajé tres pisos y di la vuelta al departamento para ver si había caído. No estaba. Subí a la terraza, pensando en nosequé. Menos. Quizás la tapia del galpón de en frente. Tampoco.
Me apoyé en la baranda y miré abajo tratando de fichar un puntito verde. Nada. Cerré los ojos pensando que así iba a poder escuchar algo. Al pedo. ¿Algún otro lugar? Ninguno.
"La pucha, me la re mandé... Encima tenía que ser justo hoy", pensaba.
Con la cabeza gacha nomás entré a la casa. Vos seguías llorando y me mostrabas la latita de picadillo dónde sabíamos darle agua. Tenías las manos acomodadas como nos habían enseñado en la catequesis. La derecha debajo de la izquierda en forma de cuchara.
<<La catu ha aprendido a volar y se fue de gira>> , dije. Te enojaste y se escuchó el portazo detrás tuyo. Ese día también lloré.



Relato n° 2 concurso #lomojado


Mojada, me gustas transpirada y aterida de frío. Mojada por fuera, húmeda por dentro, hembra rubia o negra. Helada cerveza del verano.


Relato n° 1 concurso #lomojado


Piensa en mi piel. Imagíname. Piensa en mí aún en los momentos más insospechados. Que te nazca un deseo irrefrenable por tocarme.
Imagina tu dedo apoyado en mi hombro, deslizándose suavemente por la frontera del corpiño hasta el centro sudoroso y latiente entre mis pechos.
Piensa en mi boca. Recuerda el contacto del beso: la piel carnosa y mojada de los labios que se apoyan en tus ansias.
Siente tu mano posada en la piel lisa y tirante de mis caderas, recorriendo la línea gráfica de mi tatuaje.
Recuerda el calor de la proximidad de mi cuerpo.
Imagíname mirándote a los ojos. Sonriendo. Llorando. Gimiendo de placer.
Deséame a tu lado, encima y abajo tuyo.
Necesítame débil. Fuerte. Húmeda y complaciente. Testaruda y juguetona. Feliz y quejosa.
Imagíname tuya.


Concurso #lomojado


#lomojado concurso de relatos en 48 hs.

* tema: lo mojado.

* extensión: lo que dure leer un post de facebook sin cansar o aburrir.

* participación: mandar el relato hasta las 17 hs. del LUNES 9 de diciembre como mensaje privado a la página de Ciudad del Buque.

* definición: luego del cierre de las 17 hs. del lunes 9 todos los relatos recibidos se publicarán (sin firma de autor) en la página de Ciudad del Buque y ganará el que acumule más "me gusta" hasta las 17 hs del MARTES 10 cuando cerrará la votación y se anunciará el relato ganador.

* premio al más gustado: una tarjeta de recarga de 30 o crédito de 30 en un quiosco definido por la organización.



Resultado Concurso #locrudo

Gana concurso #locrudo @nestormendoza con LLEGANDO EL VERANO.

Concurso #locrudo relato N° 4 de 4


En la ciudad del Barco, lo crudo existe y no como cocido en potencia, sino como paisaje escondido detrás de edificios de grandes dimensiones.


Concurso #locrudo relato N° 3 de 4


LLEGANDO EL VERANO

Néstor Mendoza


Ella me dice: vos sos una cosa y tu pija otra. Sabrina es un encanto, linda, inocente y brutal en sus confesiones. Pienso en eso que me dijo, y no lo entiendo. Barajo hipótesis: Quizás le gustó el revolcón que tuvimos el otro día, seguido del acto de llevarla en remis hasta su casa. Cosa que la mayoría de los tipos de la Ciudad del Buque, odiamos. Puede haber intentado decir que el sexo es una cosa y el compañero, otra. De todas maneras me voy a la cama y leo a Lévi-Strauss para desentrañar el misterio. Pero es inútil, ella trabaja de moza en un bar y lee Cosmopolitan, cosa que me encanta. Estoy seguro, ella es la indicada. Yo tan cocinado con existencialismos para mostrar cuán grande la tengo y ella tan liviana y viva. La química es una carta muy extraña, sobre todo cuando hace calor.


Concurso #locrudo relato N° 2 de 4


Anteayer me dijiste que estabas cansado de tantas mentiras. En ése momento, Ciudad del Buque me pareció pequeña.
- Nunca te mentí. Siempre ibas a ser el segundo, le dije. 
- Ya lo sé. Y no quiero. 
Te fuiste caminando despacio y desapareciste de repente. 
Ayer te mandé un sms "equivocado". No contestaste. 
Anoche te soñé.
Hoy Ciudad del Buque me parece demasiado grande.


Concurso #locrudo relato 1 de 4


BALANCE 2013


El año comenzó con una solicitud de amistad por facebook; se la envié a la bellísima actriz SCARLET JOHANSON. Esta, jamás me respondió, por lo cual la solicitud de amistad quedo truncada. Este acontecimiento me desanimo tanto, que hizo tambalear todas las nobles intenciones que tenía para todo el año.

De igual modo seguí firme en facebook, pensando que las crueldades de la vida siempre me azotarían; eso no era un presagio, sino una certeza. Así fue, que en el muro de una amiga del facebook participe con comentarios a veces agudos, en ocasiones graciosos, y en la mayoría de las veces hablando apasionadamente del amor. Mi amiga del facebook es propietaria de una editorial, de manera tal, que ante una máxima de un escrito posteada en su muro, una jauría de mujeres acuden prestas a poner: “me gusta”, o a escribir un comentario inherente, o a recordar un amor pasado. Y así fue que yo ante el posteo de mí amiga del facebook utilicé mis más sentidas palabras, mi mejor razonamiento, mostrando así mi verdadera condición de poeta: igualmente escribí acerca del AMOR.

A las pocas horas comprobé que una dama estaba felicitándome por la frase y pensamiento expuesto, e invitándome a debatir por facebook sobre el asunto. Yo, que no soy lerdo, moví el mouse y comprobé que la dama en cuestión era una mujer atractiva y que ya no me interesaba el debate sino mirar la foto de la descomunal dama. Finalmente el debate no se hizo esperar, ella en todo momento hablo de todas las bondades del amor. Yo me hacía el distraído, y escribía cosas como: “El amor es una insatisfacción innecesaria”, “que solamente conduce al dolor corpóreo”, y así, logre escribir una sarta de pensamientos amorosos que fue celebrado por una docena de desconocidos o curiosos del facebook que me leían y a la vez me instaban al amor. Yo hice mi jugada, decía en el facebook: “no al amor”, “hay que resistirse a esa tentación del corazón”, pero en realidad estaba diciendo otra cosa: “que soy un eterno enamorado del amor”. Me tome el buque por unos días, es decir me fui a CIUDAD DEL BUQUE que es más que tomarme el buque.

Realizado el debate faisbuqueano me quite el ego de encima y desaparecí de internet por unos días; al regreso me encontré con un mensaje privado. Sí, era la misma dama del debate, la atractiva mujer que me imploró que hablara de amor. De manera tal que no me quedaba más remedio que leerlo. En el mensaje me decía que había leído mi blog y que le encanto, además me reveló que en el Facebook me señalan como Juán, pero los amigos me dicen José (es decir, esta mujer me había investigado).Es cierto que tenía un blog humorístico, pero hace como diez años que ni lo abro, por otro lado los dos nombres míos era tal cual me lo decía ella. Trabamos amistad, chateamos durante todas las noches; nos contamos un poco de nuestras vidas, tomamos un café en la avenida Colón; hasta que un domingo no pude más y me le presente en su propia casa casi a las ocho de la mañana, no tuve otra opción que golpear las manos para presentarme. 

Conversamos mucho ese domingo; yo estaba muy feliz y creo que ella feliz y luminosa. Ese domingo término de la peor manera: me pidió que me separara. Me separe y llevé vida de soltero por poco tiempo. Cuando le conté a ella que me había separado, me respondió que estaba confundida, que se trató de un error, que no podía concretarse jamás lo nuestro; yo estaba en la calle con un bolso. En fin, este 2013 fue un año espantoso, repleto de mala suerte para mí. Yo, más temeroso que nunca, cerré mi cuenta de faisbuc.


Concurso #locrudo

#locrudo concurso de relatos en 48 hs. 

_ tema: lo crudo, tal como usted lo entienda, totalmente ficticio sin nombres ni lugares reales pero sí se debe situar y mencionar "Ciudad del Buque".

_ extensión: lo que dure leer un post de facebook sin cansar o aburrir.

_ mandar como mensaje privado a la página de Ciudad del Buque hasta el lunes 2 de dic. a las 10 de la noche.

_ definición: se publicarán todos en la página de Ciudad del Buque sin firma de autor, ganará el que tenga más "me gusta" hasta el martes 3 de dic. a las 10 de la noche, en caso de empate lo define el organizador.

_ premio al más gustado: una tarjeta de recarga de 30 o crédito de 30 en un quiosco definido por el organizador.-

Resultado Concurso Amores Fuertes en Ciudad del Buque

La votación se hizo con acumulación de "me gusta" en la página de facebook de Ciudad del Buque, Mariana Sayago con "El chico del fondo" y Diego París con "Empiezan de nuevo" fueron los relatos ganadores por empate en el Concurso "Amores Fuertes en Ciudad del Buque". Comparten en premio de 100 para comprar un libro, o compran uno solo y se lo prestan entre ellos.

CONCURSO AMORES FUERTES RELATO 5 DE 5


EMPIEZAN DE NUEVO

Diego París



-“Empiezan de nuevo.”-
-“Ajá. Y nosotros otra vez al rol de testigos auditivos.”-
-“No queda otra. A menos que quieras que vayamos por helados.”-
-“¡A esta hora! ¡No! Estás tan loco como él.”-
-“Nooo querida. Normalmente el flaco tiene razón. ¡Ella le sale con cada planteo que madre mía!”-
-“¡Escuchá, escuchá! Ahí empiezan a hablar más alto. Uh, parece que ella le recrimina…”-
-“¿Qué le dijo? ¿Qué él no le dedica tiempo? ¡Pero si la última vez le recriminaba que le diera espacio!”-
-“¿Podés callarte y escuchar?”-
-“Está bien, está bien…”-

Vivimos en el piso de arriba, nos mudamos hace poco. Y no es que seamos chusmas ni la versión con orejas de vouyeristas; nada por el estilo. Es que son divertidos. Nos ayudan a pasar el rato como si fuesen nuestra serie particular o nuestro reality show privado, y de paso aprendemos de ellos. Y es que nuestros vecinos de abajo son, no sé, taaan dispares. Los escuchás así, como nosotros los estamos escuchando ahora y te da la sensación de que no pueden ser pareja, ni siquiera amigos. Y luego los ves, abrazados, la forma en la que se miran incluso en situaciones tan mundanas como al bajar la escalera y decís ¡son tal para cual!
Decía que aprendemos de ellos, y la verdad es que sí. Siempre terminan zanjando sus asuntos para bien, y salen a flote fortalecidos. No importa cual empiece. El otro cede o el primero entra en razón. Y se reconcilian. ¡Y por Dios, la pirotecnia y los efectos sonoros que despliegan al hacerlo! Pero, como sea, esta vez parece que la situación está más caldeada que de costumbre. Escuchá con nosotros:

-“¡Así no se puede, es mi día libre y quiero que sea algo distinto! ¡Necesito ese día hacer algo distinto!”-
-“¿Y esa diferencia la tenés que encarar así? ¿ah?”-
-¡No me entendés! ¡Y si seguís así vas a volver a nuestra relación en un buque que se va a pique!”-
-“Buque no. Ciudad del Buque.”-
-“¿Cómo? No te entiendo.”-
-“Nuestra relación es más grande que un buque, es al menos tan grande como la Ciudad del Buque.”-
-“…”-
-“Una ciudad. Hasta donde alcanza nuestra vista. Porque todo lo que vemos es parte de nuestra relación, de nuestro amor que está presente en todo.”-
-“No empieces con…”-
-“Es adonde vivimos. Nuestro amor, o relación o como quieras decirle hoy, es donde vivimos. ¡Incluso se expande como una ciudad! Y cuando me dijiste hace un tiempo que querías que estuviese más cerca de vos, que compartiésemos más cosas…”-
-“Te fuiste al otro extremo.”-
-“Extremos, medios, arriba, abajo. Recorrería las mil dimensiones por vos. Y siempre serías, estarías en mi centro.”-
-“Decime, con tus anteriores, ¿te funcionaban estas cositas cursis tan lindas que decís?”-
-“Funcionan con vos, con nosotros. ¿Importa algo más vida mía?”-
-“Vení aquí. Besame. ¡Pero no creas que terminamos el t… Mmmpfff…”-

Y la noche y el amor siguieron su curso. Obviamente nosotros escuchamos la siguiente etapa del intercambio de opiniones de nuestros vecinos. Pero entenderás si la preservamos de vos, ¡Sería demasiado chusma de tu parte querer saber sobre eso! Además, sabiendo que el amor una vez más se impuso, sabrás disculparnos si nos despedimos y pasamos a abrazarnos por aquí. Hay lindas energías en el aire. Y eso da pie siempre a nuestras propias anécdotas.


CONCURSO AMORES FUERTES RELATO 3 DE 5


La espera


I

Te esperaba todas las noches a que vuelvas del trabajo. Era mi único fin.
Sí puede ser que durante el día hacía cosas. Salía a callejear, deambular por el barrio, hacer nada básicamente. Siempre solo. Nunca se me dio por juntarme con amigos a pesar de tener tanto tiempo libre. Otras veces me quedaba en la casa y me echaba en el sillón durante horas. El televisor estaba casi siempre prendido. Noticias de accidentes de tránsito, violaciones y asesinatos en la ciudad del Buque. Comía lo que me dejabas listo.  
Cuando se hacían más o menos las diez y media de la noche, mi corazón empezaba a latir más fuerte. Me excitaba. Tipo once llegabas. Me hacías una caricia y pasabas sin decir nada. Dejabas tu bolso, te sacabas los zapatos y calentabas algo para comer. Yo siempre te observaba desde mi sillón. Después prendías la ducha y te ibas sacando la ropa y regándola por el departamento. En esos momentos mi excitación era casi incontenible. Salías de la ducha vestida sólo con una bombacha y la toalla en la cabeza. Te acostabas.
A veces me levantaba inmediatamente. Otras veces esperaba unos minutos, como para que estés medio dormida. Iba en cuatro patas hasta tu cuarto y me metía en tu cama. Por debajo de las sábanas comenzaba a saborearte, a lamerte. Vos te aferrabas a mi cuerpo. Yo te clavaba mis garras y los ojos felinos. Maullabas. Maullábamos. Todas las noches acababa en vos.
Hasta que un día no volviste.
 

II

Te esperaba cada noche a que vuelvas del trabajo. Era mi único fin.
Durante el día salía a viborear por los barrios de la ciudad del Buque. Saludaba a los amigos sentados en las  medianeras. A la tarde me echaba en el sillón y ya no me movía.
A eso de las diez y media de la noche, mi corazón empezaba a latir más fuerte. Tipo once llegabas. Me hacías una caricia y pasabas sin decir nada. Te descalzabas. Caminabas en patas. Tus deditos blancos me excitaban. Yo siempre te observaba desde mi sillón. Prendías la ducha y te ibas sacando la ropa y regándola por el departamento. En esos momentos me lamía las patas compulsivamente y me las frotaba por todo el cuerpo. Salías de la ducha vestida sólo con una bombacha y la toalla en la cabeza. Te acostabas.
A veces me levantaba inmediatamente. Otras veces esperaba unos minutos, como para que estés medio dormida. Iba en cuatro hasta tu cuarto y me metía en tu cama. Por debajo de las sábanas comenzaba a lamerte, a saborearte. Vos te aferrabas a mi cuerpo. Yo te clavaba mis garras y los ojos felinos. Maullabas. Gozabas del dolor. Te dormías.
En las patas me quedaban pequeñas porciones de tu sangre. Me las lamía. Comenzó a gustarme.
Hasta hoy, en que no me pude contener y te mordí el cuello. El hambre de tu cuerpo pudo más. Ahora sos vos la que acaba dentro de mí. 


CONCURSO AMORES FUERTES RELATO 2 DE 5


SIN ALIENTO


“Pueblo grande, infierno chico”, ningún dicho se aplicaba mejor a "Ciudad del Buque” un lugar donde todos conocen a todos y donde nada pasa desapercibido. Escenario de una historia de amor que deja a cualquiera sin aliento:
Lo reconoció mucho antes de conocerle. Aprendió a compartir sus gustos y a amar su locura.
Fueron conocidos, fueron amigos, fueron amantes. Les gustaba jugar a ser otros.
A él le gustaba perseguirla, atraparla. Ella reía. No podía parar. Cada vez que sus manos la tocaban eran como pequeñas descargas eléctricas. Le erizaban la piel.
-¿Te animas? – le preguntó sabiendo que nunca podría negarse.
Sus ojos brillaron aceptando el reto. Suave pero firmemente, como si de atrapar una mariposa se tratara, él aprisionó su boca. Sus ojos cambiaron, se tornaron más profundos, más oscuros.
Ya no estaba jugando pero no sentía temor. Aún si la presión aumentaba o si sentía que el aire comenzaba a faltarle, no tenía miedo.
Se sentía libre. Su cuerpo relajado (sin fuerzas ya para luchar), sus parpados pesados y su respiración cada vez más pausada. 
Ahora era una muñeca más de su colección.


CONCURSO AMORES FUERTES RELATO 1 DE 5


EL CHICO DEL FONDO

Mariana Sayago


La muerta llega de vuelta a la puerta de la sala. Se aburrió un poco del ataúd y salió a dar una vuelta por las estrechas veredas de ciudad del Buque.
Mira la cara de cada uno: la tía hipermaquillada e hipocondríaca; la prima envidiosa y gorda sin vuelta; el vecino que la manoseaba cuando era pequeña; el tío que la violó desde los 3 hasta los 10 años; la abuela que la castigó con un rebenque cuando tenía 4; las amigas, hablando del muchacho desconocido que está al fondo de la sala y que no saludó a nadie; los amigos, algunos lamentándose de la colección de discos que, un día de aburrida, había pintado y puesto en sus paredes, arruinándolos; el vecino de la calle 4 hablando con la vecina que vive a dos casas, mintiéndole que él había sido su novio y que la mamá de ella, lo adoraba; los primos, contando chistes. Todos malísimos pues el más grande de ellos tiene 16 años; otros tíos lejanos, contando chistes. También malísimos, pues nada tiene que ver la edad con la estupidez…
Su madre: su amor y su odio; su paz y guerra continua.
Sigue caminando y llega al fondo: se da cuenta que el chico que estaba apoyado en el fondo del salón y que no había dado bola a nadie, era su vecinito del frente. Ella se había enamorado de sus tremendos ojos verdes cuando tenía 11 años.
Como ya manejaba el lenguaje y las acciones sexuales casi como la mejor; fue al primero al que le hizo sexo oral voluntariamente. Obviamente que, después de eso, él la siguió a todos lados, convirtiéndose en su amigo, su compañero, casi su perrito faldero.
Ahora era un flaco largo y desgarbado. Debía tener 23 o 24 años. Los tremendos ojos verdes seguían ahí.
La muerta se preguntó si seguiría casado: todavía recuerda la mañana que se levantó y se enteró que en la casa del frente había una boda. Ella tenía 13 y él 16. El pastor, cura o pai o lo que fuese de su iglesia lo hizo casar con una niña que estaba embarazada. Él siempre clamó su inocencia.
Se arrepentía de no haberlo amado completamente. Nunca pasaron de la oralidad. Ella le enseñó a él como hacérselo: exactamente como le gustaba. Siempre planearon una primera vez completa pero nunca se dio.
La muerta piensa. Lo mira. Quiere tocarlo. ¿Podría?...
Sonríe pícara y le susurra en el oído: “te espero en el baño…”
Él oye algo. Un susurro. Un calor cercano. De repente, le dan ganas de ir al baño.
Entra y cierra la puerta. En el compartimento chiquito, la muerta se aprieta contra él. Él se siente tocado, apretado, acariciado y se asusta.
Ella le dice: “tranquilo mi amor, tranquilo….” Y lánguidamente, se resbala hasta que con los labios aprieta el cierre de la cremallera y la abre…
Él… no sabe si sueña o se había muerto o qué, pero sabe que es ella y se entrega. Como siempre lo había hecho: desde muy pequeños gozaron de cosas de adultos, pero él nunca le preguntó de dónde las había aprendido. Aunque intuía todo.
Ahora, él ya un hombre y ella una joven hermosa (y muerta...) saben que tienen que saldar deudas.
Cierra sus ojos y con sus manos modela la corporeidad y la turgencia conocidas. La respiración caliente en su ingle, eriza todos sus sentidos: sabe que es todo un imposible, pero ella está ahí: la toca, la siente: calor, respiración, cabellos, cintura… sólo que no debe abrir los ojos. Lo intentó y el miedo casi le gana y su órgano amenazó con recluirse para siempre, al ver sólo los cerámicos de la pared de enfrente.
“Sigamos”, piensa y cierra los ojos y le baja la persiana a la razón.
Acaricia su cabeza y la acerca a sus labios: “vení”, le susurra él… el beso es tímido al principio y después, ya no. La avidez nunca se había extinguido y el fervor de la juventud se humedece en las bocas abiertas y encajadas. Su aliento dulce es tal como lo recuerda y los cuerpos se amoldan perfectamente, tal como lo recuerda.
Ella está desnuda (“¿Cuándo se había sacado la ropa?”, piensa. “¿Acaso la tenía puesta? Se responde a sí mismo) y las manos tientan todos los rincones. Todos.
“Mi amor… mi amor…” le dice él.
“Te esperaba…”, le susurra ella.
El Tío Pocholo tiene incontinencia. Había llegado 2 horas antes al velorio y ya había ido 10 veces mínimo al baño. Vuelva para cumplir la vez número 11 y ve la puerta cerrada. Toca sordamente, para evidenciar su presencia y se dispone a esperar. Todavía puede.
Adentro, no existe ningún ruido, ninguna realidad, nada.
No se puede decir que hay dos jóvenes. Ni dos cuerpos. Tal vez pueda decirse que los amantes por fin cumplen el sueño de volverse uno en el acto amatorio. Pero tampoco es eso.
La muerta se siente más viva que nunca. Él la apoyó en la pared y con su lengua marca el camino hasta sus caderas y más allá. Sus sentidos bombean locos y casi en el primer hálito de respiración que siente en su entrepierna, comienzan sus orgasmos.
El Tío Pocholo empieza a preocuparse. Quien fuera que sea que estaba adentro, está tardando mucho. No sabía si esa paparruchada moderna de “calzoncillos para la incontinencia” que la Leonila lo obligaba a usar, funcionaría.
Detrás de la puerta, él abre las piernas de la muerta y hunde su cabeza en sus labios inferiores. Siempre le había gustado eso. Bebe goloso todos sus fluidos y cada vez más ansioso, aprieta sus muslos.
De repente se para y la alza, se sienta en sobre el sanitario que tiene la tapa cerrada e imagina que la mira a los ojos. Imagina que ella asiente: cómplice, amante y divertida, y la penetra.
Los años de miradas deseosas. Los días de canciones románticas. Las noches de insomnios y autosatisfacciones sobre su foto. Las ganas. Los sentimientos. Las palabras. Los llantos. La noticia espantosa de su muerte. Los apetitos. La adolescencia. Las esperanzas. Todo, todo fundido en un solo y único grito mojado, gozoso y volcánico.
El Tío Pocholo vuelve a golpear. Ya podemos estar casi ante la inminencia de una emergencia nacional. Empieza a dolerle el bajo vientre y no puede estar ni parado ni sentado.
Golpea más fuerte. Nada. Aporrea la puerta y ésta se abre.
Entra presuroso y piensa: “Qué estúpido, no había nadie en el baño”.


CONCURSO AMORES FUERTES RELATO 4 DE 5


QUEDAMOS EN VERNOS


Quedamos en vernos a las 19:30hs en un bar de la Moreno. Habían pasado ya seis meses desde que cortamos cuando por fin atendió una de las muchas llamadas que le hice en todo ese tiempo. Necesitaba verlo. Limar asperezas. Poner un punto final definitivo a nuestra relación. Ya había llorado lo suficiente. Ya lo había superado. Estaba lista para dar vuelta la hoja.

Debo admitir que en esos seis meses sin verlo la pasé muy mal. Había noches en las que me la pasaba tomando whisky con una bata blanca toda sucia mirando programas de jardinería. Era una situación tan patética. Incluso empecé a ir a terapia. Al principio me pareció medio al pedo, porque de lo único que hablaba con mi psicóloga era de mi infancia y de mi vieja. Igual, con el correr de las sesiones, me di cuenta de que ya no me despertaba con lágrimas en los ojos. Los domingos ya no veía Titanic seis veces seguidas, sino sólo dos o tres. Hasta volví a maquillarme y peinarme para ir a clases. La terapia había dado sus frutos.

Sin embargo, cuando lo vi entrar al bar el corazón me empezó a latir a mil por segundo. Me saludó con un beso en el cachete, se sentó, pidió un licuado de durazno con leche y se quedó ahí, en silencio, mirando a la calle por la ventana.

Inmediatamente lo entendí. Yo lo había citado. Era mi deber empezar la conversación:

– Estás más flaco ¿no?

– Si. Vos también estás linda.

– Gracias.

– ¿Para qué me querías ver?

– No sé... hace un montón que no nos vemos.

– ¿Osea que me llamaste porque querías saber si estaba más flaco o no?

– No, bueno... entre otras cosas. Quería saber cómo estabas también.

– Bien. Todo bien.

– ¿Por qué terminamos?

– Otra vez con eso.

– Nunca me dijiste porqué. Simplemente me dejaste.

– Nada. No quería estar con vos. Ya está.

– Pero estábamos muy bien nosotros.

– No estábamos muy bien nosotros. Nos cagábamos a puteadas todos los días. Me llamabas todo el tiempo. Yo te llamaba todo el tiempo. No me dejabas ver a mis amigos...

– ¿No te dejaba ver a tus amigos?

– No me dejabas ver a mis amigos nunca. Toda la hora me hablabas de tu compañero ese de las rastas.

– ¿En serio?

– Si.

– Es verdad. A mi me gustaba ese compañero. Me había olvidado de eso. Igual no te importaba que yo hablara toda la hora de él.

– Me chupaba bastante un huevo la verdad.

– Bueno, cuando yo estaba con vos no comía.

– Bueno, cuando yo estaba con vos comía mucho. Me comía tu comida me parece.

– Ah, no estábamos bien.

– No estábamos bien. Hace memoria...

Es verdad. Yo no era feliz con él. Era el tipo de mujer que siempre odié cuando estaba con él ¿Escenas de celos? ¿Que no lo dejaba ver a sus amigos? Yo no soy así. Soy mejor que eso. No tiene nada que ver conmigo este tipo ¿Quién es? Osea... me acabo de acordar que le gustan Chayanne y Arjona ¿Hace seis meses que lloro por un tipo al que le gustan Chayanne y Arjona? ¿Me parece a mí o me fui al carajo? ¿Qué me pasó?

Ahí es cuando me di cuenta de lo ridículo que era estar mal por un tipo. Eso me hacía mierda el ego. Me desconocía. No podía ser que lo llamara quince veces al día. No podía ser que llorara en la calle, en el colectivo, en la facultad. Ni siquiera me dejó por mi mejor amiga o algo así, bien traumático. Nada de eso. Estaba hecha una pelotuda. Una melodramática, como esas de las novelas mexicanas que tanto aborrezco. Yo no soy así, como las típicas minitas de Ciudad del Buque que odian su vida, pero no se quieren dar cuenta de ello. Que van a ver a sus novios jugar a la pelota con sus amigos, o que lo esperan cuanto sea necesario hasta que salga de clases para verlo. No, yo no soy así. Mi existencia no es tan miserable.

Desde chicas nos enseñaron que el amor era el mayor regalo que podía recibir una mujer. Viendo las películas de Disney aprendimos a anhelarlo con cada nervio de nuestro cuerpo. El amor de a poco nos convirtió en personas que ocupan más de la mitad de su espacio mental en pensar y hablar de hombres ¿Perdón? “No tiene porqué ser así”, reza alguna propaganda por ahí.

Y me di cuenta también de que yo no quería eso para mi vida. Hablar más de él que de mi. Privilegiar sus intereses por sobre los míos. Yo estaba bien. Tenía mis cosas, mis amigas, mi carrera. Hasta había empezado a mandar mi curriculum a algunos medios a ver si me contrataban. No necesito de un hombre para ser feliz. No señor. No puede ser que un hombre me defina, me determine.

Había aprendido la lección. De ahora en más iba a ocuparme de mi, de mis proyectos, de mis intereses. Y no iba a dejar que un hombre me alejara de ellos. Me sentí tan plena. Tan orgullosa. Había recuperado la dignidad que había perdido en esos seis meses. Por fin me sentí lista para irme. Ya lo había olvidado. Pero entonces me dijo:

– ¿Y ahora estás de novia?

– No ¿vos?

– Tampoco.

– Ah... ¿Y qué quieres hacer ahora?

– No sé... ¿Quieres garchar?

– Bueno. Dale.



PRIMER CONCURSO ANTI-LITERARIO DE CIUDAD DEL BUQUE



AMORES FUERTES EN CIUDAD DEL BUQUE




-CONTAR sin vueltas, de manera directa y sin rebusques, una situación fuerte en una relación de amor fuerte entre personas que se amen o que se hayan amado, sea una relación formal o informal, legal o ilegal, abierta o cerrada, pública o clandestina.

-Valen anécdotas, recuerdos, episodios, encuentros, reencuentros, peleas, etcétera.

-Puede ser mitad real mitad inventado o todo real o todo inventado (igual nunca se sabrá) Debe tener personajes, no se usarán nombres de personas reconocibles de ninguna manera.
-Puede ser cómico, dramático, trágico o tragi-cómico o cualquier cosa.
-Vale cualquier forma: diálogo, monólogo, cuento.
-Para firmar se puede usar nombre, nick o seudónimo.
-En algún momento debe hacer alusión o mencionar a la "Ciudad del Buque".

EXTENSIÓN de 1 página de word mínimo y hasta 4 páginas de word como máximo.

PARTICIPARÁ cualquiera de cualquier CIUDAD, edad o idioma aunque deben estar escritos o traducidos al castellano/ español.

CADA participante podrá enviar la cantidad de historias que quiera.

PREMIOS:

Premios especiales a la más divertida - más interesante - más guay si reciben 10 o más de éstas calificaciones en el blog hasta las 20 hs. (hora argentina) del lunes 25 de noviembre Día de la Soberanía argentina.

Premio al relato ganador: un vale por 100 pesos argentinos para comprar un libro de ficción o de cocina o de auto-ayuda. DEFINICIÓN: El relato ganador será el que reciba más "me gusta" en la página de facebook hasta las 20 hs. (hora argentina) del lunes 25 de noviembre Día de la Soberanía argentina.


¿A cuáles se las considerará mejores?: a las más atrapantes, dinámicas y vivas desde la primera hasta la última frase, sin importar el adorno literario ni las metáforas ni los rebusques.

ENVIAR LA/S HISTORIA/S al correo electrónico: leaseconmoderacion@gmail.com

PLAZO desde hoy hasta las 23:59 hs del 5 de noviembre de 2013 .

Podrá ser declarado totalmente desierto. El fallo será inapelable. Cualquier imprevisto será resuelto de manera unilateral. Las bases podrán ser editadas para dar más precisiones. El hecho de participar implica el conocimiento y aceptación plena de estas bases.

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Ciudad del Buque, donde no importa si sabes escribir, lo que importa es que lo cuentes y que a alguien le importe.

A PRIVATE TRANSMIGRANTE ´XPERIENCE IN CIUDAD DEL BUQUE


Dende “El Hawar” (en sentido lato) Estroncio*



I guanna be a portenio/ I don´t wanna be a santiaguenio/ I not even neither goanna be a guarani nor fueguino/ I guayana be a cheto portenio (not cerro portenio)… Later standing on the couch eating cucuruchos I sentí (feel) que no estaba conforme not comfortably being a santiaguenian numb. Then, an inconformist spirit possessed me and I wanted to be at least a coolish santiaguenio, or even more a portenio ´cause it is better than this ser-del-Interior para, en resumidas, to have the best things, the power and for all that lucha de clases stuff (where los portenios always wins) Therefore, I looked around and I took the remote control of my ser to connect the other, la another side, la dark side of the provincias. I pushed the fast-forward of my life as a fofe and slow pajueran to temple myself as a new hard gamer in a metropolitan style. The sleeping santiaguenio awake and he comes to heard all those typical exclamations like “chango”, “ia-veo”, “culiao”, “te-has-pasao”, “te-bandias” como una hilarious native cosmovision that we must leave behind ¿donchu?
Sin embargo, after my decision of to be a different person without the sino of the provinciano cabulero, adormecido and boquiabierto, pasando al new pibe born in Capital Federal o por lo menos en la pampa bonaer-sense, presto a vivir Miamizado o Niuyrokized… algo vino de las estrellas, something from the space exterior fall into my barrio, my home. It was the very strong experience of Being in these days: the insinuante apparition of La Gorda Chechena. ¿Who´s this girl tan parecida a una madonna renacentista pero del Cáucaso? ¡Guow! She was on a wave of immigrants post la debacle or descalabro of the Soviet Union. ¿But why they choose this provincia cagada de calor si vienen del mucho frío? ¿Acaso ellos wanted to changear totalmente de vida? She not manejaba not much the castelanio así que tiraba un más-o-menos inglish: Jey Jaguar you? Fine, zenks. Do you want to think an ice-cream? To think? Did you thinking an ice-cream? No, to eat or drink ai´ser. Anyway, vamos.
La Dagor me despabiló los planes, she appreciates my santiaguenian mood. We fall in love softly en el mientras tanto compartiendo los little morones, that green herbal infusion from Misiones and some tortillas de El Parque Aguirre. With la so-sweet and weights-a-lot chechena takeamos a walk across El Centro de la city and we make also la ronda de los so-called Foolish Love Seekers in La Plaza Libertad. Of course, we took sendos ice-creams of “Cerecett” o “Limar” y así. Bue, agbvio que una birra con maní not puede faltar, acompañada con un lomito para no desfallecer very drunk. This lovestory with La Gorda Chechena me hizo olvidar lo de ser portenio pos ella hallaba muy encantadora my tonada y le gustaba la “Rubia Moreno” (auch!) and the galloper groove (sic) of “El Puente Carretero”. Al fin, glosolalia mediante, trajinando baldosas de lapachos florecidas, acabamos tras las closed windows de la casa en la siesta del amor en las provincias -as it is said by el vate Rosenberg (a.k.a. El Zoco) Devengados los pequeños dreams cultivados en plastic vasitos, unfolding the primary feelings that provides the cure and closing the session of virtual expectations that overruled my universe of desires… I extended me all along on the Chechenian Girl. Her charm and deep warming voice let me down to the Yellow Submarine of Love´s Universo. Ha-ha-ha, do you remember the portada (cover) of that “Love” álbum? Yeahs! I think our álbum musto be something like that…
I forgot my porteniosity obsession en benefit to my chechenian love ballad. Katya suddenly me trajo a renewal of my post-native emerging provincian Self. Then, tank-god, with other colleagues después we formed a grupo named “The Galloping Trusas Gave a Chaniar Band” -abridged “La Gave Chaniar”. We played a style que nos bautizamos el folkatón rock (a too-late-night mix of rock, northern folklor y reggaetón) and as a band we only make sickteen presentations in public before La separación. The idea fue tocar no mucho para no terminar peleando. Our band toured around the provincias del Norte acting in comedores de estaciones de servicio, terminales de ómnibus, playones de autos usados y motels or hosterías. La última presentación fue en el extinto restaurant “La Buitra” de Ciudad del Buque (distrito zona franca de la ciudad de Santiago del Estero). Mientras duró la Gave estuvo integrada por Katya Grozny-a-bell (lead voice and guitar), Carlos “Zé Carlinhos” Gómez (dobro guitar and voices), Fabio “Fantasy” Barajas (guitar, synths and flute) El Guille “Rosa Kipi” Zeppa (drums and programming) and me in bass, cello and voices; ocasionalmente se sumaba “El Senior Grilho” as a DJ. Grabamos dos limited edition demos con seis temas cada uno: “Rollo in the Laundromat” y “A place for God in the Big Bangkok”. These recordings are now unconsegueables and only in the Multimedia Archive of The Congress of the Union de allá hay copies to listen with a good pair of headphones.
In lo atinente a me, with Katya me había tirado a la pileta mal o sea a fondo es decir it means a full. I will never forget her. She was a savage wind to my helechos wings, an echo into my waste valley, the locus of my goce. Once, in the gas station de El Xarillal, me confesó que tenía un hijo en Chechenia y tenía que volver a verlo. Oh, go, Katy, go! El nene (doce años) se había quedado home alone con su grandma porque el dad se había pirado a Hong Kong. Hace un año que Katya me dejó a me and Ciudad del Buque una fría y muy afternoona tarde de otoño. Few days ago I sent a message to her: “I really miss you K”. No answer yet. Ella tenía un Huawei.






Previamente publicado en Revista Cabeza.